ALIMENTACION SALUDABLE

Una alimentación saludable es aquella que proporciona los nutrientes que el cuerpo necesita para mantener el buen funcionamiento del organismo, conservar o restablecer la salud, minimizar el riesgo de enfermedades, garantizar el desarrollo y crecimiento adecuado.

Requerimientos nutricionales

Los requerimientos nutricionales que necesita cada persona varía en función de su edad, sexo, talla, actividad física y estado de salud o enfermedad.

Una dieta saludable tiene que reunir las características siguientes:

Tiene que ser completa:

Debe aportar todos los nutrientes que necesita el organismo: hidratos de carbono, grasas, proteínas, vitaminas, minerales y agua.

Equilibrada:

Los nutrientes deben estar repartidos dependiendo del objetivo del paciente. Ejemplo: 50% hidratos de carbono, 20% proteínas, 30% grasas.

Suficiente:

La cantidad de alimentos ha de ser la adecuada para mantener el peso dentro de los rangos de normalidad, y en los niños, lograr un crecimiento y desarrollo proporcional.

Adecuada:

Adecuada a la edad, al sexo, a la talla, a la actividad física que se realiza, al trabajo que desarrolla la persona y a su estado de salud.

Variada:

Debe contener diferentes alimentos de cada uno de los grupos (lácteos, frutas, verduras y hortalizas, cereales, legumbres, carnes y aves, pescados, etc.), no solo porque con ello será más agradable, sino porque, a mayor variedad, habrá también una mayor seguridad de garantizar todos los nutrientes necesarios.

Inocua:

Higiénica, que no contenga sustancias perjudiciales, como gérmenes patógenos. Ejemplo: desinfectar apropiadamente frutas y verduras.